Castillos de carton
Estabamos en 1984 y teniamos veinte anos Madrid tenia veinte anos Espana tenia veinte anos y todo estaba en su sitio un pasado oscuro un presente luminoso y la flecha que senalaba en la direccion correcta hacia lo que entonces creiamos que seria el futuro. Aquel fue nuestro riesgo y nuestro privilegio. En ese momento luminoso recordado en la distancia se situa la historia subyugante arrebatadora de Castillos de carton la nueva novela de Almudena Grandes. Con ella la autora vuelve al Madrid exaltado e inocente de los anos ochenta de la movida y los excesos pero tambien de los deslumbramientos y la perdida de la inocencia. Maria Jose Sanchez trabaja de tasadora de arte en una casa madrilena de subastas. Un dia recibe la llamada de un antiguo companero y amante Jaime Gonzalez anunciandole que su comun amigo Marcos Molina Schulz se ha suicidado. La noticia no solo devuelve a la narradora a su epoca de estudiante de Bellas Artes cuando todavia sonaba con ser pintora sino que le hace revivir la torrencial historia de amor que vivieron los tres cuando ella apenas tenia veinte anos. Con la amarga emocion de lo que se siente irrecuperable Maria Jose reconstruye los detalles de aquella pasion triangular imposible y excesiva la alegria desbordante con que exploraron el sexo la intimidad sin tapujos recien estrenada la entrega complice y excluyente a la pintura. Fueron destellos de una felicidad intensa verdadera que solo acabaron ensombreciendo los celos de los amantes y la injusta negociacion con el talento de los tres aprendices de artista.